miércoles, 9 de julio de 2008

Superheroe electrocutado

Sus maldades son tan sutiles que me es casi imposible explicarlas, deletrearlas, exponerlas. Él es eso: indescriptible. Porque si uno lo ve por la calle, no se da cuenta de nada. Un tipo común, que no llama la atención, que no tiene nada atractivo o alarmante. Es, a simple vista, un hombre cualquiera. Pero ¡ pobre de aquel que se atreva a cruzar el umbral de su apacibilidad !. De nuevo, es solo mi punto de vista. Quizás lo conocen, lo hayan visto y hasta hablado con él. Un ser perverso, un estafador de la mente. El hombre que amo. ¿Cómo se puede amar y odiar a alguien al mismo tiempo? Así es mi amor: atemporal. Por momentos olvido el presente. Mezclo personalidades, momentos, tiempos y así mi amor se vuelve atemporal: sin poder distinguir lo que fue y dejó de ser, de lo que nunca será. Me invade una desesperanza que más parece una descarga eléctrica poderosísima que me deja nublada, ciega, somnolienta, imbécil, destartalada. Sin poder de decisión, inactiva e imperante: necesito dormir, o morirme, o que me maten. Y si no sufro otra descarga eléctrica me quedo dormida al poco tiempo. Casi siempre es así:
1 Situación
2 Crisis de llanto
3 Hipótesis
4 Descarga eléctrica
5 Dormir

1 comentario:

Florchula dijo...

ABZURDAH ♥♥♥
No sabia qe lo habias leido, como verás, amo ese libro :$ jajaja.